Mas Candí
Gunyoles de Avinyonet / Barcelona / Catalunya / España.
La bodega Mas Candí, situada en las Gunyoles de Avinyonet, a las puertas del Parque Natural del Macizo del Garraf, comenzó su andadura en 2006. Nació del deseo de un grupo de jóvenes viticultores que decidieron continuar con el legado de sus abuelos, quienes cultivaron estas tierras desde el siglo XVII. Su compromiso con la naturaleza y la búsqueda de un equilibrio natural en sus viñedos se reflejan en su práctica agrícola ecológica y de mínima intervención.
Mas Candí se dedica a la recuperación y cultivo de variedades autóctonas, como el Xarel·lo y el Sumoll, adaptadas al clima de la zona. Con un enfoque respetuoso hacia la viticultura, la bodega evita el uso de fertilizantes, fungicidas o pesticidas, nutriendo las plantas con sus propias hojas transformadas por los microorganismos del suelo. Además, todo el trabajo en el viñedo es manual, desde la poda hasta la recolección de la uva, que se realiza a mano en cajas de 15 kg.
En 2005, Ramón Jané y Mercè Cuscó construyeron la bodega Mas Candí, con el objetivo de crear un proyecto que uniera tradición y técnicas modernas. Ramón, formado en viticultura y enología con prácticas en Borgoña y Champagne, aporta su experiencia para preservar y recuperar las variedades ancestrales que sus abuelos cultivaron en la región. Así, la bodega se ha consolidado como un referente en el Penedès, Cataluña y el Mediterráneo, destacándose por su apuesta por la calidad y el respeto al entorno.
Actualmente, la bodega cuenta con 20 hectáreas de viñedo en Avinyonet del Penedès y Guardiola de Font-Rubí, todas certificadas ecológicamente por el CCPAE. Mas Candí sigue trabajando con la misma pasión y dedicación que sus fundadores, y continúa buscando y recuperando variedades autóctonas que se habían perdido o dejado de cultivar debido a su bajo rendimiento, asegurando así la preservación del patrimonio vitivinícola de la región.
Misión de Ramón Jané en Mas Candí
La misión de Ramón Jané en Mas Candí se centra en la preservación y el respeto por la tradición vitivinícola de la familia, así como en la recuperación de variedades autóctonas de la región. Su objetivo es continuar con el legado de sus abuelos, manteniendo un equilibrio con la naturaleza y trabajando de manera ecológica y con mínima intervención. Ramón busca producir vinos que reflejen el terruño y la esencia del Penedès, al mismo tiempo que adapta las prácticas vitícolas modernas y sostenibles a las técnicas tradicionales. Su misión es crear vinos de alta calidad, respetuosos con el medio ambiente, y garantizar la preservación de las variedades ancestrales y el patrimonio vitivinícola local.
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*En la feria Vella Terra se verifican los vinos de las bodegas participantes mediante análisis para asegurar que cumplan con nuestros estándares y ofrezcan autenticidad y transparencia en el evento para el visitante consumidor final. Nuestras bodegas elaboran vinos utilizando levaduras naturales propias, sin filtrar ni clarificar, sin aditivos enológicos y con sulfitos naturales generados durante la fermentación. En caso de añadir sulfitos, el máximo permitido es de 30 mg/l, cumpliendo así con los estándares de la feria. Más info aquí.
Nota: Mientras que los vinos convencionales pueden contener un máximo total de “sulfitos” (SO2) de 200 mg/l, aquellos con certificación ecológica están limitados a 150 mg/l según el Reglamento de Ejecución (UE) núm. 203/2012. Además, los vinos ecológicos pueden incluir otros aditivos (hasta 120 permitidos) y el uso de levaduras comerciales.