VOLVIENDO A LOS ORIGENES,
RETOMADO LA CALIDAD: LA CERVEZA ARTESANA NATURAL

La definición de cerveza artesana, hecha en microcervecerías que producen una cantidad limitada de cerveza de manera totalmente artesanal en todos los pasos del proceso de elaboración, se aplica típicamente a cervecerías que son mucho más pequeñas que las cervecerías industriales (que producen a gran escala). Este tipo de cervecerías se caracterizan principalmente por su trabajo en dotar de énfasis en el sabor y la técnica de fermentado.

El movimiento de las cervecerías artesanales comenzó a principios del siglo XX en el Gran Bretaña y posteriormente se extendió por toda Europa. A medida que el movimiento creció, algunas cervecerías expandieron su producción y distribución, y el nombre de cervecería artesanal pasó a ser reemplazado por el término más amplio de producción artesanal. Un brewpub (término en inglés que también puede ser traducido como microcervecería), se refiere más específicamente a un restaurante o pub que produce su propia cerveza para ser vendida y consumida dentro de sus instalaciones.

La producción artesanal es un término más amplio para los desarrollos en la industria que vinieron después del movimiento artesanal de la última parte del siglo XX: cervecerías comerciales pequeñas y de dueños independientes que emplean métodos cerveceros tradicionales y ponen énfasis en el sabor y la calidad. El término es a menudo reservado para las cervecerías establecidas a partir de los años 1970, pero puede ser utilizado para cervecerías más antiguas con un enfoque similar.

En la actualidad, la producción artesanal está más establecida en los Estados Unidos, en donde figuraba como el 7,6% de las ventas de cerveza, aunque en Europa siguen aumentando día a día los artesanos que deciden porducir su propia cerveza.

Los cerveceros artesanales se enmarcan dentro de empresas pequeñas, independientes y que usan métodos tradicionales ayudándose de las últimas tecnologías del sector.

Esta nueva nueva generación de cervecerías pequeñas enfocadas en la producción tradicional está teniendo mucho éxito entre los consumidores que buscan principalmente una calidad organoléptica superior a la que ofrecen las cervezas industriales de consumo masivo.

Aunque originalmente “microcervecería” fue utilizado para describir el tamaño de las cervecerías, gradualmente pasó a reflejar una actitud y un enfoque alternativo a la flexibilidad en la producción de cerveza, adaptabilidad y atención al cliente. En la actualidad, la tecnología también ha influido en la cultura de la producción de cerveza en pequeña escala, incluso muchos consumidores (principalmente en el norte de Europa y EE.UU) han optado por fabricarse su propia cerveza en casa.

Las microcervecerías adoptan una estrategia de marcadotécnia diferente a la de las cervecerías industriales de mercado masivo: ofreciendo productos que compiten por su calidad y diversidad, en lugar de reventar el mercado con precios bajos y campañas masivas de publicidad o patrocinios en multitud de eventos con coartada cultural. Su influencia ha sido mucho más grande que su cuota de mercado reflejada en el hecho que las grandes cervecerías comerciales han introducido nuevas marcas que han tratado de competir en los mismos mercados que las microcervecerías. Cuando esta estrategia falló a las grandes marcas industriales (que en su mayoría no pueden competir en términos de calidad con las producciones artesanales), invirtieron en microcervecerías e incluso las llegaron a comprar a golpe de talonario.

En la pasada edición de Vella Terra contamos con cuatro ejemplos que destacan en el mercado nacional de cervezas artesanas por su excelencia. La calidad prima por encima de todo: el arduo trabajo de estos artesanos les ha situado en la pole position de las cervezas artesanales de nuestro país.

Moska

La sociedad Birrart nace a partir de las experiencias de dos maestros cerveceros caseros: Josep y Silvia, que durante los últimos años se han dedicado a elaborar cerveza casera artesanal de altísima calidad desde Girona. Desde sus inicios comprobaron que sus cervezas tenían el suficiente éxito entre los consumidores que las probaban porqué poco a poco aumentaba exponencialmente la demanda. Viendo que las microcervecerías eran un negocio prácticamente inexistente en nuestro país, decidieron montar una al estilo de las microcervecerías locales que funcionan en muchos países europeos. En Birrat se dedican a elaborar, distribuir y vender su producción de cerveza de baja y alta fermentación, todas sin filtrar ni pasteurizar: rubias, tostadas y negras, además de cervezas de temporada o producciones especiales. Moska, su marca comercial, se ha convertido en una de las favoritas de los paladares cerveceros más exigentes.

Querbeer

Mar y August capitanean desde Berga con su carácter innovador una de las marcas de cerveza artesana que más despuntan en nuestro país. Llevan tiempo elaborando sus propias cervezas y se dieron cuenta a través de los clientes del restaurante donde trabajan que, cada vez más, el consumidor final busca productos artesanos, de proximidad y calidad. Este hecho les animó a dar un paso más y dieron a conocer su cerveza artesana a un público más amplio. Con su carácter innovador y emprendedor empezaron a investigar y a formarse con artesanos cerveceros de prestigio para ampliar y enriquecer sus conocimientos, llevando un paso más allá a la cerveza artesana Quer.

Al ser una microcervecería tienen una producción mucho más controlada, y eso les permite ser más autónomos, creativos e innovadores con sus cervezas, 100% naturales, de calidad, de proximidad y envasadas en Quer, cervecera del Berguedà. Sus cervezas no pretenden ser un mero producto de mercado, quieren llegar a diferentes paladares y despertar el interés del consumidor final con su línea de cervezas frescas, jóvenes, innovadoras y atrevidas. Quer es más que una marca, es una ilusión, un sentimiento, una mirada a un futuro sostenible y una manera de divulgar nuestro patrimonio gastronómico.

Segarreta

Desde Santa Coloma de Queralt (Tarragona), La Segarreta nos ofrece una de las mejores gamas de cerveza artesanal producida en nuestro país. Elaboran cervezas únicas y perfectamente reconocibles por su marcado carácter local: tierra de cereales y de lúpulo es el marco perfecto y explica la idiosincrasia de sus cervezas artesanas. Solo utilizan ingredientes 100% naturales y, literalmente, están obsesionados por la calidad, por eso solo hacen producciones limitadas y están tan ligadas al territorio. Cervezas auténticas, artesanales, naturales, sin ningún tipo de aditivos, sin filtrar ni pasteurizar. Cervezas de indisolubles a la Segarra y del rio Gaià, hijas de trigo y la cebada que se cultivan en los campos de la Segarra y del excelente lúpulo que nace en la ribera del río Gaià, La Segarreta es, hoy por hoy, una cerveza indispensable para los amantes de las cervezas artesanales naturales.

 

Cyclic Beer Farm

Ale & Hop, restaurante de Barcelona que rinde culto a la cerveza artesana de calidad, y con una excelente propuesta de cocina vegetariana y vegana, con uno de los mejores ambientes de la ciudad condal: familiar, trato cercano y didáctico a la hora de recomendar y asesorar a los clientes sobre las cervezas artesanas (disponen de más de diez titradores y una amplia selección en botella) es donde podemos degustar las anteriores propuestas de las que os hemos hablado: Moska, Segarreta y Quer, todas ellas elaboradas con una materia prima cultivada de manera natural y de altísima calidad, sin procesos químicos añadidos. Actualmente Ale & Hop está elaborando su propia cerveza artesanal, bajo la seña de identidad de Cyclic Beer Farm, de la que muy pronto os hablaremos, ya que utilizarán productos locales y fabricarán sus cervezas respetando los ciclos de cada estación en la futura fábrica artesana que están construyendo en la Sagrera (Barcelona).