Còsmic Vinyaters vinos naturales: dos paisajes y un mismo valor de vida.

Viajamos hacia el Empordà, en el norte de Catalunya, con la ilusión de conocer las tierras de Salvador Batlle de Còsmic Vinyaters, quien hace expresivos vinos naturales con un profundo amor por su tierra. Entre los Pirineos y el mar Mediterráneo, esta región se extiende en un territorio singular marcado por la presencia de la Tramontana, viento que se deja notar con fuerza en la mayoría de las viñas.

Salvador estuvo presente en la feria Vella Terra desde la primera edición y no nos tiembla el pulso si decimos que es imagen y semejanza de una región vanguardista en agricultura y vinificaciones naturales, una de las más antiguas del mundo desde la llegada de las colonias greco-romanas y clave para el desarrollo y proliferación de los viñedos a lo largo de la península.

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Este viticultor llegó muy joven en el 2013 a Agullana, una pequeña población en el interior del Empordà, Salvador, originario de Rodonyà, en el Baix Penedès, desde su adolescencia siempre tuvo la ilusión de hacer vinos con su propio estilo y sobretodo sin depender de nada y de nadie: (algo que debería de contagiarse a las nuevas generaciones): amor por las vides, el vino, el trabajo y la independencia.
Movido de esta inquietud empieza a buscar en Catalunya tierra y viñedos con la posibilidad de alquilarlos, y por una estupenda casualidad encuentra además de viñedos una pequeña bodega en el centro de Agullana y es aquí donde aplica toda su voluntad y asienta las raíces del proyecto Còsmic Vinyaters.

Vinos naturales

Salvador, desde sus inicios, tuvo claro que el vino se hace solo con uva y que se origina exclusivamente desde una agricultura sana y natural, respetando los ciclos y con nula o la mínima intervención.
Casi sorprendiéndonos nos cuenta que ya en el 2004 embotellaba (para uso familiar) ancestrales de Sumoll, demostración de sus ganas de salir de las clásicas vinificaciones del Penedès y volver a los orígenes de cepas autóctonas.

El Empordà cuenta aproximadamente con unas 2.000 hectáreas de viña, entre el Alt y Baix Empordà, aunque contadas con los dedos de una mano las que son trabajadas en agricultura estrictamente ecológica, biodinámica o natural.

Asimismo, tuvo la suerte de que cuando llegó se encontró con un territorio prácticamente virgen, ya que las viñas que alquiló estaban abandonadas desde hace tiempo.

Vinos naturales

En una comarca explotada principalmente en su vertiente más costera, Salvador cultiva entre 300 y 400 metros de altura, goza de una buena climatología y una buena ventilación durante diferentes épocas del año, nos confía como el viento -Tramuntana- es una gran ayuda para alguien que trabaja una agricultura tan volcada a la naturaleza como la suya.

Vinos naturales

Criterios biodinámicos, vinos naturales.

No tienen aporte animal en sus parcelas, y podemos decir con certeza que practica criterios biodinámicos con una coherencia fuera de lo común y sus vinos naturales son el reflejo de un trabajo consciente tanto en la tierra como en la bodega.

Vinos naturales

Para él, como para otros pocos viticultores, la biodinámica es realmente una filosofía de vida, y esto es lo que más nos interesa destacar: la sensibilidad que demuestra hacia ciertos temas, la teoría y la filosofía de este movimiento, que es demostrar con hechos que lo que se está aportando es calidad de vida en el ecosistema, y haciendo un producto final vital creado con procesos manuales y vinificaciones naturales.

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Durante todo el año trabaja con todos los preparados biodinámicos, según las necesidades de su tierra. Nos comenta que por la composición de su terreno, granítico/arenoso, busca sembrar para su cubierta vegetal, gramínea y leguminosa con la intención de  evitar la erosión fijando en el suelo nitrógeno atmosférico de forma natural.

Entre sus viñas se puede apreciar hierbas adventicias y sus florecillas que alegran la vista, junto a una parcela tiene su propio depósito de compost que servirá de nutriente para el suelo y para sus propios preparados.

Vinos naturales

Alquila 5 hectáreas y se nota el orgullo en sus ojos cuando habla de sus Cariñenas -variedades gris, blanca y tinta- las reinas de esta comarca catalana. Salvador también vinifica Marcelan, Sumoll, Macabeu, Sauvignon Blanc y Cabarnet Franc.

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Salvador está en plena evolución: después de un paseo entre las viñas nos enseña su bodega reformada, justo en el año donde por primera vez vinificará once referencias de vinos naturales, nos comenta como las características de las diferentes añadas influyen en su decisión final de utilizar diferentes depósitos, ánfora, inox o vieja madera en su afinamientos finales, difícilmente sus crianzas se repiten de igual manera un año tras el otro, demostración de artesanía ligada a la necesidades que la naturaleza le marca.

Valentía, Confianza, Paciencia: esencia para el buen vino.

En el restaurante del pueblo de Agullana, Salvador nos hace catar sus vinos, entre todos ellos destacamos:

Valentia 2016: Cariñena Blanca, probablemente la referencia más vista en la ciudad de Barcelona, sorprende por su amplitud en boca acompañada de típicas notas cítricas y balsámicas de esta variedad, un vino que en sus primeros años de vida se presenta con una tensión típica de una sana vitalidad.

Confiança 2016: Garnacha Roja con un ligero aporte de Cariñena negra que nos sorprendió por su finura y a la vez por ser tan profunda. Este es uno de los vinos catados donde más se nota la mano y la sabiduría del viticultor: notas de huerta selvática y frutos rojos maduros se equilibran perfectamente, un vino que con el tiempo descansará y ganará aún más complejidad.

Vinos naturales

Paciència 2015: Un ancestral del 2015 de Carinyena blanca, un vino hecho en ánfora de arcilla con una sola fermentación, una producción de 800 botellas al año, muy pocos restaurantes en el mundo pueden permitirse el lujo de tenerlo entre sus cartas. En estos años catamos muchos ancestrales que identifican perfectamente su terroir con mucha personalidad, ‘’Paciencia’’ es un mix de elegancia, finura y persistencia que difícilmente se consiguen vinificando con este método, un auténtica joya del norte catalán.

Vinos naturales

Para despedirnos nos lleva hacia la última finca:  Llocató, un lugar mágico cerca de la localidad de La Vajol, un pequeño anfiteatro natural donde todavía podemos contemplar grandes y pesadas rocas en forma circular, probablemente un viejo asentamiento de siglos atrás.

Justo en el medio de sus viñas y a la sombra de un árbol centenario, nos encontramos con pequeñas piedras que forman un altar, lugar perfecto para que Salvador nos sorprenda con su ‘’Esencia 2015’’.

Vinos naturales

Un Carinyena blanco vinificado con la ayuda de una receta del siglo XI muy utilizada en Catalunya, básicamente es la reducción del mosto flor en ebullición concentrando azucares y ácidos, un vino que ya desde la nariz se presenta con una complejidad fuera de lo común. En boca notas de albaricoques y melocotones se mezclan con vivacidad a notas más maduras de higos y caramelizados, simplemente no tiene fin: concentrado en acidez y de baja graduación alcohólica (9%).

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Luego de este viaje hemos comprobado que estamos delante de uno de los jóvenes viticultores/elaboradores catalanes que más ha crecido en los últimos años y que, gracias a su pasión y voluntad volvió a dar el justo reconocimiento a una zona vitivinícola importantísima  y con gran historia en Catalunya, y lo más destacable: con respeto al entorno, crando vinos naturales de forma artesanal.

                                                                                                                                                                                 Texto: Ale Delfino                                                                                                         Fotos: Candela Muschetto

 

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